En esta miniserie de la rotación por los cursos del cole, hoy me ha tocado, nada más y nada menos, que el curso de...
Y además, hoy es uno de esos días en los que te das cuenta de la función tan importante que puede tener un profesor, incluso estando de prácticas. Dentro del curso, he tenido conmigo a una niña con un pequeño déficit de nivel en matemáticas. Mi profesora de apoyo, mientras el resto de alumnos ha realizado un exámen de inglés, me ha aconsejado que ayude a esa niña con unos ejercicios de matemáticas. Y... creedme que casi me emociono al salir del colegio.
Explicándole los conceptos con mucha paciencia y detenimiento, he conseguido que esta niña aprenda a sumar y a restar. Al finalizar el día, me ha dado las gracias más de una docena de veces... Pero no es eso lo que me ha llenado. Lo que realmente me ha llenado... y podéis creer que al escribir esto me tiemblan un poco las manos... es el hecho de que esta niña me haya dicho... "Profe, ¿vas a venir mañana? Me ha gustado mucho que me ayudaras".
Es uno de los aspectos que quiero resaltar en mi entrada de prácticas de hoy... Que no todos los niños son iguales. Cada uno de ellos es un mundo y un contexto diferente. Y os aseguro que la experiencia vivida hoy... Ha sido, sin duda alguna, una de las más gratificantes que me he llevado en el poco tiempo que llevo de prácticas.
P.D: Sé que es una entrada algo más corta de cómo las suelo hacer... pero el hecho de recalcar esta experiencia... es algo muy grande para un futuro profesor como yo.